Comprar una casa es uno de los logros más importantes de nuestra vida, además de comprar un coche o montar un negocio. Tener un hogar hace que cubramos nuestra necesidad de techo y de resguardo, extensivo además para las pertenencias que adquirimos.
Pero quizás comprar una casa sea la parte más fácil de todo esto, ya que lo difícil viene cuando tenemos que hacernos cargo de su bienestar. Es cuando entra en juego el tema de la seguridad.
La seguridad es la sensación de bienestar o de plena confianza en algo o alguien. En términos sencillos, las puertas acorazadas son dispositivos que garantizan la seguridad, sobre todo por que ofrecen la tranquilidad a quienes las instalan.
Esto significa que la seguridad es una necesidad que se debe cubrir, sobre todo en esta época donde las amenazas sobre la seguridad individual o colectiva se encuentran en continua amenaza por efecto de la delincuencia.
Las casas tienen necesidades particulares de seguridad, y por ello existen numerosos dispositivos que atienden de la mejor manera posible los requerimientos de los propietarios.
Conociendo los grados de riesgo de las propiedades
Estos requerimientos están relacionados con el grado de riesgo, que no es otra cosa sino las posibilidades de robo que presenta un espacio, de modo que el riesgo va disminuyendo en función de la cantidad y calidad de dispositivos de seguridad que se encuentren instalados.
El grado de riesgo suele clasificarse de acuerdo al perfil del ladrón que se aparezca en los diferentes escenarios. Dependiendo del entorno, elegirás los dispositivos indicados. Es importante coordinar con un cerrajero para que la escogencia sea lo más asertiva posible.
De momento mencionaremos los grados de riesgo que puede llegar a tener un entorno, el perfil del ladrón y las posibles soluciones de seguridad que se pueden implementar para que los robos y otras actividades relacionadas no tengan lugar en tu propiedad.
Riesgo bajo
Es el que suele producirse en las viviendas de zonas habitacionales de clase media, o bien en las comunidades de vecinos dispuestas en edificios de alta densidad de habitantes, de modo que la ocupación de los inmuebles por parte de los dueños es permanente.
Los ladrones experimentados generalmente no tienen mucho tiempo para actuar en estas circunstancias, y por lo tanto no se arriesgan mucho, ya que conocen que los artículos dentro de las viviendas no tienen mucho valor.
Habrá uno que otro ladrón oportunista que no vacilará en robar ciertos objetos de poco valor; se trata de un individuo que es discreto y que puede llegar a aprovechar cualquier descuido, como que el dueño haya dejado mal cerrada la puerta o que la puerta no cierre con mecanismos complejos.
Los ataques que se producen en este tipo de riesgo son los apalancamientos, el ganzuado, rotura del cilindro, bumping, taladrado y otros. Para minimizar estos ataques, lo que te recomendamos es que instales una puerta acorazada de grado 3.
Estas puertas vienen con cerraduras de seguridad que son lo suficientemente potentes como para frenar este tipo de robos. Sólo tienes que preocuparte por la sustitución del bombín en caso de daños u obsolescencia.
Los bombines de la marca Tesa, Keso o Mauer son ideales para incluir, aunque puedes contemplar otras posibilidades como los ejemplares de Mul-T-Lock, ABS y otras marcas adicionales. Las cerraduras invisibles como las de Remock Lockey pueden instalarse sin ningún problema.
Riesgo Medio
Los entornos con riesgo medio de robo son los de clase media, y baja densidad de vecinos. Algunos propietarios ocupan continuamente mientras que otros están presentes sólo por temporadas. Esto hace que los ladrones tengan mayor tiempo para aplicar técnicas de robo sofisticadas.
En el riesgo de robo medio, además de los oportunistas, se hacen presentes los merodeadores, los cuales son ladrones que estudian a sus víctimas de forma meticulosa, analizando con qué tanta frecuencia acuden los dueños a sus domicilios.
Los ataques que se producen en este tipo de riesgo son todos los métodos del riesgo bajo, taladrado severo, butrón con herramientas manuales y la indeseable extracción del cilindro. En este caso se instalan puertas acorazadas tradicionales, además de otros dispositivos.
Si bien es cierto que los bombines anti bumping proveen protección a la puerta, es necesario llevar la seguridad a un nivel superior incluyendo escudos acorazados y escudos magnéticos, siendo los de la marca MCM, Amig o Tesa los más notables.
Riesgo alto
Este nivel de riesgo se contempla en las viviendas ubicadas en las zonas residenciales de clase media-alta. Por lo tanto, no se toma en cuenta la densidad de vecinos (quienes pueden ser muchos o pocos), ni los periodos de ocupación de los inmuebles.
Los ladrones pueden llegar a ser un poco más arriesgados, ya que las posibilidades de robar algo valioso son mucho mayores. Los que llevan a cabo este tipo de robos son los ladrones profesionales, quienes trabajan asociados en bandas criminales.
Cuentan con herramientas sofisticadas que les permiten aplicar métodos de robo de los riesgos bajo y medio, apalancamientos severos y butrón severo con herramientas manuales. Ya para este caso se deben instalar puertas de seguridad de nivel superior.
Se trata igualmente de puertas acorazadas, pero cuentan con un grado superior de resistencia contra la rotura y aislamiento acústico y térmico. Estas puertas fueron concebidas para frenar ataques en los que el ladrón dispone del tiempo suficiente para cometer sus fechorías.
Las cerraduras multipunto de la marca Mul-T-Lock se pueden instalar en este tipo de puertas, e incluso se pueden elegir bombines de la misma marca. Y si tu domicilio se encuentra desocupado por mucho tiempo, lo mejor será incluir una puerta anti okupa.
Riesgo muy alto
Para estos efectos se contemplan los domicilios ubicados en zonas de clase alta, independientemente de la densidad de vecinos o de los periodos de ocupación, además de empresas obligadas por las órdenes ministeriales (armeros, joyerías, etc.).
Es necesario acondicionar los entornos con puertas aún más resistentes que las del riesgo alto, pues el ladrón que realiza ataques a estos sitios no tiene ningún reparo en conseguir el mejor de los botines por medio de sus acciones.
Igualmente puede tratarse de bandas organizadas que realizan esta clase de delitos. Los ataques que se contemplan en este tipo de riesgos son; las técnicas empleadas en los riesgos inferiores, ataques con armas de fuego y butrón con herramientas eléctricas.
Las puertas que se instalan en los ambientes de riesgo muy alto, cuentan con certificación de resistencia antibala y resistencia al butrón. Se trata igualmente de puertas acorazadas, que por supuesto cuentan con características especiales.
Está demás decir que se deben instalar dispositivos que sean capaces de advertir y prevenir el delito, como es el caso de cámaras de vigilancia y los sensores de movimiento, respectivamente.
No se puede dejar de lado la instalación de una buena cerradura de seguridad, y las cerraduras multipunto Tesa son las mejores a tomar en cuenta. Los escudos son un infaltable, siendo los de la marca Disec un buen ejemplo a considerar.
Ahora bien, en el caso del interior del hogar, éste debe estar equipado con alarmas y cajas fuertes como las de la marca Fichet para almacenar los bienes que los propietarios consideren valiosos.
Evitar los robos es posible; sólo necesitas la asesoría correcta, un poco de paciencia para conseguir los dispositivos acordes a tus necesidades y el presupuesto necesario para invertir en una mejor seguridad. Todo sea para disminuir la incertidumbre de robo.