Las puertas correderas se están volviendo muy populares en estos días debido a sus hermosos diseños y funcionalidad. La falta de bisagras tradicionales, sustituidas por un riel compacto, las hacen perfectas para espacios limitados.
Este tipo de puertas deslizantes suelen también funcionar como ventanas, cuando son fabricadas enteramente en cristal. Esto ilumina la habitación y permite que entre más luz natural.
Colocándolas en las zonas adecuadas, mejorará la funcionalidad y la elegancia de cualquier hogar con su diseño simple pero práctico.
¿Piensas instalar una puerta corredera en casa? Eche un vistazo a esta guía para aprender más sobre los componentes de la puerta corredera, cómo reparar problemas comunes y cómo reducir sus puntos débiles.
¿Dónde debo instalar una puerta corredera?
Las puertas correderas son perfectas para puertas interiores. Son la opción deseada para dormitorios, cocinas y salas de estar. Incluso puedes instalar una puerta corredera en tu baño. Sólo tienes que asegurarte de que es el tipo de puerta correcto que garantizará tu privacidad.
En exteriores, pueden ser perfectas para patios, terrazas o jardines. Sin embargo, ten en cuenta la seguridad de tu propiedad. Las puertas correderas son en su mayoría de cristal, así que no las utilices en lugares donde requieras gran seguridad.
¿Qué tipos de puertas correderas hay en el mercado?
Las puertas correderas más populares son las que puertas correderas dobles. Estas puertas no ocupan espacio en la pared porque están hechas de dos hojas de vidrio y la puerta se abre superponiéndose a la otra, que puede ser un fijo u otra hoja móvil. ventana de vidrio fijo.
Las puertas correderas colgantes se fijan a un riel por encima de la puerta y se deslizan sobre la pared. Para instalarlas es necesario tener un espacio libre en la pared que tenga al menos ancho de la puerta.
Las puertas correderas de pared se deslizan en huecos en la pared. Son una gran solución si no tiene espacio en la pared y quiere conseguir un aspecto minimalista en tu casa. También son perfectas para armarios, ya que la puerta “desaparece” en la pared cuando se abre.
Otro tipo popular son las puertas correderas plegables. En estas las hojas se pliegan sobre sí mismas cuando se abre la puerta.
¿Cuáles son las medidas de las puertas correderas?
A diferencia de las puertas tradicionales, las puertas correderas se pueden encontrar en una variedad de tamaños. En la mayoría de los casos se realizan a medida para el espacio que tenga disponible.
En caso de que quiera comprar un modelo prefabricado es necesario que primero realices mediciones cuidadosas de la pared y el espacio disponible. Así podrás elegir el tipo de puerta corredera apropiado para este espacio.
¿Qué material debería elegir para la puerta corredera?
Las puertas correderas suelen estás fabricadas con hojas de cristal de gran formado dentro de un marco de madera, aluminio, vinilo o fibra de vidrio.
La elección de una puerta corredera con marco de madera mejorará el aspecto de su casa. Las puertas están disponibles en diferentes colores – desde rústico, oscuro hasta madera clara y en diferentes estilos – puede elegir entre diferentes estilos, marcos, número de ventanas y motivos.
Pero la madera se puede agrietar y deformar fácilmente. Por eso no se recomienda utilizar las puertas correderas de madera en el exterior o en zonas húmedas donde la humedad puede dañar la madera.
Las puertas correderas de aluminio también están disponibles en diferentes colores y diseños. El aluminio es un material fuerte y duradero. Estas puertas son perfectas para el exterior porque pueden soportar todo tipo de condiciones climáticas.
Las puertas correderas de vinilo también son fuertes y muy duraderas, pero están disponibles en colores limitados y la sensación que dan es de baja calidad.
¿Cuál es el mantenimiento de una puerta corredera?
Si decides instalar una puerta corrediza, debes cuidarla bien para que pueda mantener su buen estado de funcionamiento durante más tiempo.
Si la puerta corredera se encuentra en el exterior, debes mantener el marco exterior y el riel limpio de polvo y suciedad y asegurarse de que el mecanismo funciona correctamente.
Aspira y limpia regularmente el marco y los herrajes de la puerta. Se recomienda lubricar el mecanismo de cierre y deslizamiento dos veces al año.
Piezas de una puerta corredera
Algunas de las partes de las puertas correderas difieren de las partes de una puerta tradicional. Conoce mejor estas piezas para que puedas entender si un determinado mecanismo funciona correctamente.
Manijas de puertas deslizantes
Los tiradores de las puertas correderas tienen un mecanismo diferente al de las puertas tradicionales. En las puertas correderas, es necesario tirar de manillas que desbloquean el deslizamiento de la puerta.
Cerraduras de puertas deslizantes
Las cerraduras de las puertas correderas funcionan de forma diferente. Son cierres simples que se bloquean entre sí cuando la puerta está cerrada. Se pueden bloquear con llaves o con la acción de giro de la cerradura.
Riel de puerta corredera
Los rieles se instalan en los marcos y proporcionan un lugar para que los rodillos se deslicen. Los rieles pueden instalarse en la parte inferior, superior o en ambas, dependiendo del tipo de puerta.
Rodillos de la puerta corredera
Los rodillos son elemento que giras y que se fijan en la parte inferior y/o superior de la puerta. Encajan en el riel de la puerta corrediza y la mantienen en su sitio mientras se deslizan.
Desventajas de las puertas correderas
Como ocurre con todos los tipos de puertas, las correderas tienen algunas desventajas. Las siguientes son las principales:
Las puertas correderas no son seguras
Los ladrones pueden atravesarlas fácilmente, incluso cuando están fabricadas en vidrio de seguridad. Su propia transparencia también la convierten en una vitrina para exponer tus pertenencias a ojos curiosos.
Si la puerta está cerrada con llave, no será muy difícil para la mayoría de los ladrones abrirla. La mayor parte de las cerraduras de puertas corredizas están hechas de cierres simples que pueden ser removidos.
Las puertas deslizantes son fáciles de romper
Las puertas corredizas son estéticamente hermosas y pueden llevar luz solar a cualquier habitación. Pero no son tan fuertes como las puertas normales de madera maciza o las puertas de seguridad.
El cristal se puede romper fácilmente, por lo que los ladrones pueden entrar a tu propiedad desde ese punto. Las puertas deslizantes también pueden ser retiradas si no están bien atornilladas. Lo único que tienen que hacer los ladrones es levantar la puerta y liberar los rodillos del riel.
Las puertas correderas no son tan duraderas
Aunque las hojas pueden ser duraderas, especialmente las puertas de aluminio, con el paso de los años estas puertas empiezan a atascarse y a tener problemas de óxido. Esto se debe a los accesorios y herrajes. Puede elegir cambiarlos cada pocos años o sustituir la puerta entera.